En un importante operativo llevado a cabo en Jinámar, Gran Canaria, la Policía Nacional ha arrestado a una madre y su hijo, acusados de estar detrás de una red de tráfico de drogas y blanqueo de capitales. Según las autoridades, esta familia utilizaba su hogar como un centro de venta de sustancias perjudiciales, especialmente heroína y crack.

La Jefatura Superior de Policía de Canarias indicó que la investigación se inició tras recibir una denuncia sobre el constante vaivén de personas en la vivienda, lo que despertó sospechas de que allí se estaban comercializando y consumiendo sustancias ilícitas. La alerta de los vecinos fue clave para que los agentes emprendieran una misión de vigilancia que confirmó sus presunciones.

Los investigadores detectaron rápidamente que la casa funcionaba como un punto de venta activo de drogas, lo que llevó a un registro policial. Durante el operativo, se confiscaron 43 gramos de cocaína, 13 gramos de crack, así como 4.409 pastillas hipnóticas y sedantes. Además, se hallaron 5.710 euros en efectivo, lo que sugiere un significativo movimiento financiero relacionado con estas actividades delictivas.

Tras recopilar toda la evidencia necesaria, la Policía procedió a poner a disposición de la autoridad judicial a los detenidos, quienes ahora enfrentan serias acusaciones que podrían acarrear severas consecuencias legales.