
En un lamentable suceso ocurrido en Arrecife, Lanzarote, la Policía Local tomó acciones decisivas el 10 de mayo tras recibir numerosas denuncias sobre un taxista que, presuntamente, conducía bajo los efectos del alcohol y las drogas. Este incidente plantea serias preocupaciones sobre la seguridad en el transporte público de la zona.
La alerta inicial provino de varios pasajeros que temían por su bienestar al observar que el conductor de un taxi pasaba por alto las normas básicas de seguridad al volante. Ante esta situación, las autoridades decidieron emprender un dispositivo de localización para dar con el vehículo implicado.
Cuando finalmente pudieron detener al taxista, descubrieron que llevaba clientes en su interior y procedieron a realizar las pruebas correspondientes para detectar el nivel de alcohol en su sistema y la presencia de sustancias ilícitas. Los resultados fueron preocupantes: el conductor registró una tasa de 0,46 mg/l de alcohol en el aire espirado, significativamente por encima del límite legal permitido.
Como consecuencia de esta infracción, se le impuso una multa de 1.000 euros y la pérdida de 6 puntos en su licencia. A esto se sumó otra sanción de igual cuantía y puntos por dar positivo en cocaína. Estas acciones legales evidencian la gravedad de la situación y la necesidad de mantener estándares rigurosos en el sector del transporte.
La problemática no se detiene ahí, ya que el incidente ha sido comunicado al Ayuntamiento de Arrecife y a la Concejalía de Transportes y Movilidad, dado que representa una violación severa de las regulaciones del servicio de taxis en la ciudad. Este caso subraya la importancia de garantizar la integridad y seguridad tanto de los pasajeros como de la comunidad en general.
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.