El 4 de julio, la Guardia Civil de Fuerteventura llevó a cabo la detención de dos individuos, de 41 y 46 años, acusados de haber cometidos varios robos en establecimientos locales, con un botín total que asciende a 22.502.15 euros en el municipio de La Oliva.

Las detenciones se produjeron tras recibir múltiples denuncias en el Puesto Principal de Corralejo por parte de comerciantes y restauradores de la zona, quienes habían sido víctimas de robos, algunos en más de una ocasión, según información proporcionada por la Guardia Civil.

Los delitos habían ocurrido entre diciembre de 2024 y junio de 2025, generalmente en horas de la noche. Los presuntos delincuentes llegaban a los locales utilizando coches de alquiler, ocultando las matrículas durante la ejecución de los robos y empleando disfraces con el fin de enmascarar sus identidades.

El patrón en cada uno de los robos era similar: lograban entrar a los comercios mediante la fuerza, utilizando herramientas como mazas y cizallas para violar las puertas, lo que les permitía, en cuestión de minutos, apoderarse de efectivo de las cajas registradoras, artículos electrónicos, y grandes cantidades de tabaco y licor, acumulando un valor que supera los 10.000 euros.

Para desentrañar la identidad de los culpables, los agentes realizaron un exhaustivo análisis de las grabaciones de las cámaras de seguridad, complementando esto con seguimientos a los sospechosos y a los comercios que podrían ser sus próximos blancos, proceso que resultó clave para captar características significativas.

Gracias a este trabajo, las fuerzas de seguridad lograron identificar a dos individuos cuyo físico y vestimenta coincidían con la de los responsables de los robos. Un dato que llamó la atención de los investigadores fue que ambos hombres se presentaban con atuendos similares en varios de los incidentes, lo que facilitó aún más su identificación.

Las evidencias recolectadas, junto a otros elementos de prueba, permitieron acotar la búsqueda en torno a los dos sospechosos, quienes finalmente fueron arrestados por ser presuntos autores de siete robos con fuerza, sustentados por las pruebas reunidas durante la investigación.

Los detenidos, junto con toda la documentación pertinente, han sido enviados a disposición del juzgado de guardia en Puerto del Rosario, donde se determinarán los pasos a seguir en este caso.