LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 19 de agosto. Un suceso alarmante ha salido a la luz en Gran Canaria, donde el SEPRONA de la Compañía de Vecindario ha detenido a un individuo bajo sospecha de maltrato animal. La víctima, una perra, fue hallada en un estado tan crítico y desolador que los veterinarios se vieron obligados a practicarle la eutanasia para evitarle un sufrimiento innecesario.

En un comunicado, la Guardia Civil ha destacado la naturaleza extrema de las lesiones de la perra, las cuales eran tan severas que no había otra alternativa más que intervenciones humanitarias en su delicada situación.

Este trágico episodio se remonta al 16 de julio, cuando los agentes recibieron un aviso anónimo que alertaba sobre un perro en situación crítica, que había sido trasladado de urgencia a una clínica veterinaria en Carrizal.

Los profesionales de la salud animal evaluaron el estado lamentable del can y determinaron que su recuperación era inviable. Ante la imposibilidad de restaurar su bienestar, se optó por la eutanasia como la opción más compasiva.

El informe veterinario reveló que la perra presentaba una deshidratación del 7%, un claro indicio de que había estado desatendida durante un tiempo prolongado. Además, se identificó una masa mamaria considerable que había desarrollado úlceras, lo que llevó a una grave infección interna.

Este cuadro se complicó aún más, pues en la herida proliferaron larvas, intensificando el sufrimiento del animal durante al menos tres días antes de su trágico desenlace.

Las investigaciones que han surgido a raíz de este caso se remitirán al Juzgado de Guardia de Telde y a la Fiscalía de Medio Ambiente de Las Palmas, en un esfuerzo por garantizar que se rinda cuentas por el sufrimiento impuesto a este ser indefenso.