La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal internacional que introducía cocaína y hachís en las islas Canarias para enviarla luego a la Península. Durante la operación, los agentes han detenido a cinco personas como presuntos autores de los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal, al tiempo que han intervenido.

La investigación comenzó a principios de 2023, cuando se tuvo conocimiento de la existencia de una organización criminal internacional que poseía una red importante dedicada al transporte de diferentes sustancias estupefacientes. La organización se dedicaba a la recepción tanto de hachís procedente del norte de África como de cocaína procedente de Sudamérica.

Para llevar a cabo sus actividades, utilizaban empresas logísticas de transporte legítimas, lo que dificultaba la investigación y enmascaraba los movimientos de la droga hasta llegar a su destino final. Los destinos variaban entre diferentes lugares de la Península y el archipiélago canario, especialmente la isla de Tenerife y Fuerteventura.

La organización contaba con múltiples transportistas que recibían órdenes precisas sobre cómo y dónde recoger y entregar la sustancia estupefaciente, utilizando furgonetas de alquiler. Durante la investigación, se llevaron a cabo tres registros en domicilios en Madrid, Tenerife y Fuerteventura, donde se incautaron 510 kilogramos de cocaína y 1.500 kilogramos de hachís, además de diversos bienes y útiles relacionados con la confección y preparación de la droga.

La Policía pudo identificar a los encargados de la organización criminal, algunos de ellos con antecedentes por delitos violentos. Los detenidos fueron localizados en la isla de Gran Canaria, Toledo, Fuerteventura y Algeciras, cuando uno de ellos trataba de huir a su país de origen. Todos ellos han sido puestos a disposición judicial y se ha decretado el ingreso a prisión de dos de ellos. La investigación continúa abierta y no se descarta la detención de más personas relacionadas con el entramado criminal.