La Fiscalía Europea enfocará su investigación en cuatro contratos por un total de 263.093,39 euros, que presuntamente fueron obtenidos a cambio de "dádivas, regalos o pagos" al general retirado de la Guardia Civil Francisco Espinosa cuando era responsable del Proyecto GAR-SI Sahel. Este último fue un proyecto financiado por la Comisión Europea y administrado por la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (Fiiapp). Espinosa es el único investigado en la trama "Mediador" que permanece bajo prisión preventiva.
La juez Ángeles Lorenzo-Cáceres acordó enviar la parte de las investigaciones relacionadas con los contratos del proyecto de la Unión Europea a la Fiscalía Europea, después de que esta última reclamó su competencia. Los cuatro contratos están valorados en 30.991,74 euros, 43.801,65 euros, 14.000 euros y 174.400 euros, respectivamente.
El empresario José Antonio Suárez, también conocido como "El Drones", habría logrado conseguir hasta tres contratos de suministro de equipamiento para GARSI-Sahel en 2020 y 2021 para Mauritania, Níger y Malí. A pesar de ello, Espinosa negó haber favorecido a Suárez para la obtención de dichos contratos.
La juez instructora afirmó que "según las investigaciones, esos proyectos podrían haber sido conseguidos a cambio de la entrega por el empresario beneficiado -en referencia a José Antonio Suárez- de dádivas, regalos o pagos al General de Brigada de la Guardia Civil, Francisco Espinosa Navas, en su condición de responsable director del Proyecto GAR-SI Sahel."
La Fiscalía Europea envió un decreto al Juzgado en el que se reconoció competente para llevar el caso. Como resultado, la juez Lorenzo-Cáceres decidió remitir la causa a la Fiscalía Europea con testimonio íntegro de las actuaciones relacionadas con el general retirado, los cuatro contratos del Sahel y el empresario José Antonio Suárez. Sin embargo, el juzgado canario continuará investigando la presunta trama liderada por Juan Bernardo Fuentes Curbelo, alias "Tito Berni", su sobrino Taishet Fuentes, el general Espinosa y el empresario canario Antonio Navarro Tacoronte, también conocido como el "mediador".
Según el sumario del caso, el grupo se dedicaba a cobrar dinero, así como a viajes y fiestas a cambio de favores políticos, y tenía una jerarquía perfectamente estructurada y definida, con una clara división de funciones relacionadas con la corrupción.
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