La Asociación de Cáncer de Mama de Tenerife (Ámate) ha manifestado su preocupación al Diputado del Común, Rafael Yanes, sobre el retraso en los tratamientos de radioterapia por la falta de aceleradores lineales y profesionales sanitarios en el Hospital de La Candelaria.

Según Ámate, la tardanza en reemplazar dos aceleradores lineales ha disminuido el servicio de radioterapia en más del 50% y está causando demoras de meses en las listas de espera para este tratamiento, lo que puede empeorar la enfermedad.

Carmen Martín, psicooncóloga de la asociación, afirma que el plazo de espera entre la finalización de la quimioterapia y el inicio de la radioterapia es de entre uno y un mes y medio, y algunas pacientes han esperado hasta cuatro meses. Además, destaca que este retraso está generando efectos secundarios psicológicos en los pacientes debido a que se acentúa la ansiedad y el miedo ante la incertidumbre de lo que va a ocurrir.

Rafael Yanes indicó que el número de casos de cáncer de mama en las Islas Canarias ha aumentado un 20% en la última década y, por lo tanto, es necesario aumentar los recursos para prestar los servicios adecuados. Además, advirtió que los pequeños retrasos en estos tratamientos pueden tener consecuencias irreparables.

En este sentido, el Diputado del Común se ha comprometido a establecer contacto con los responsables del Hospital de La Candelaria para conocer el estado de la sustitución de los aceleradores lineales y cómo está afectando a las personas enfermas de cáncer de mama.