El municipio de Moya, en Las Palmas de Gran Canaria, está preparado para hacer historia esta Navidad con un ambicioso proyecto: la creación del turrón más largo del mundo. Esta iniciativa contará con el respaldo de la reconocida empresa de chocolates Tirma, así como con la colaboración del chef Aridane Rivero, el pastelero Yeray Reyes y los estudiantes del CIFP Felo Monzón Grau-Bassas.

El objetivo es alcanzar una impresionante longitud de 200 metros de turrón, que se exhibirá a lo largo de la principal arteria del pueblo el 20 de diciembre. Este esfuerzo, informado por el Ayuntamiento de Moya, busca superar los récords actuales que marcan la referencia de un turrón de 160 metros elaborado en Perú y otro de 110 metros en Tenerife.

El turrón, elaborado con chocolate y praliné de avellanas, también incorpora ingredientes típicos de la región, como los famosos suspiros, además de una variedad de galletas y chocolatinas Tirma. El alcalde Raúl Afonso explicó que la longitud de la calle principal de Moya es de 190 metros, y se buscará completar los 200 necesarios para establecer el nuevo récord.

"La elaboración comenzará en una pastelería, donde se producirán aproximadamente 150 metros del turrón, y el resto se elaborará en el lugar del evento. Planificamos este día junto con la visita de Papá Noel, lo que promete ser una fiesta familiar memorable", agregó Afonso.

Tirma, responsable del chocolate para esta creación monumental, está trabajando en la producción de más de 300 kilos de chocolate. Virgilio Correa, su director general, expresó su satisfacción por formar parte de esta innovadora propuesta y espera que despierte el interés por visitar la Villa de Moya.

Los chefs Aridane Rivero y Yeray Reyes han comentado que el turrón contará con una variedad de rellenos, desde los tradicionales suspiros hasta innovaciones que tienen pensadas. Además, se asegurará una opción para quienes tengan alergias a los frutos secos, permitiendo que todos puedan disfrutar de este dulce.

El alumnado del CIFP Felo Monzón Grau-Bassas también se unirá al proyecto, destacando la oportunidad de aprendizaje que representa para ellos. "Es un honor poder contribuir y crecer en nuestras habilidades", señalaron los estudiantes.

Este turrón colosal requerirá 200 kilos de chocolate, 60 kilos de avellanas y un adicional de 60 a 80 kilos en distintos rellenos, que incluirán productos como galletas y suspiros. La elaboración de los primeros 150 metros llevará alrededor de cuatro días, mientras que la finalización en el evento tomará entre tres y cuatro horas, con la participación activa de 20 a 25 voluntarios, incluyendo pasteleros locales interesados en ser parte de este evento sin igual.

Los asistentes podrán degustar y comprar el turrón en un acto simbólico el 20 de diciembre, con los ingresos destinados a una ONG del municipio, fomentando así un espíritu solidario en esta festividad. La celebración no solo busca romper un récord, sino también unir a la comunidad en torno a una tradición dulce y solidaria.