El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, se ha mostrado optimista respecto al pacto migratorio que se está negociando en la Unión Europea (UE), y espera que este ofrezca una respuesta unificada al fenómeno migratorio. Según Clavijo, esta respuesta debe incluir el desarrollo y la cooperación con los países de origen, así como todos los acuerdos diplomáticos necesarios para evitar más pérdidas de vidas en la ruta atlántica.

Clavijo señaló en una entrevista que es importante que los 27 estados miembros lleguen a un acuerdo común en esta materia, en lugar de que países como España, Italia, Francia, Alemania o Polonia ofrezcan respuestas diferentes. Sin embargo, el presidente de Canarias también expresó su crítica hacia el pacto migratorio, especialmente porque no aborda el problema de los menores no acompañados, algo que constituye uno de los principales desafíos para Canarias, donde más de 4.500 menores están bajo la tutela de la comunidad autónoma.

Clavijo reconoció las dificultades que implica hacer frente a un volumen tan grande de menores migrantes y destacó la importancia de garantizar sus derechos a través de la educación, la adquisición de habilidades lingüísticas y la mejora de sus perspectivas de futuro. El presidente de Canarias también subrayó que ha echado de menos la solidaridad por parte del Gobierno de España y otras comunidades autónomas en relación con los menores migrantes, y enfatizó la necesidad de una modificación legislativa para que el Estado asuma la responsabilidad de su distribución por todo el territorio nacional.

En cuanto a los adultos, Clavijo señaló que las relaciones con el Gobierno central funcionan correctamente en relación con los centros de identificación en el CATE de Barranco Seco, la derivación a la península y la planificación del espacio para la acogida. Actualmente, existen alrededor de 7.000 plazas disponibles, que se utilizan para garantizar una llegada y salida fluida de los migrantes.

Por último, Clavijo hizo hincapié en que el desarrollo en los países de origen y el despliegue de Frontex en las costas de los países emisores, como Marruecos, Mauritania y Senegal, son fundamentales para abordar este fenómeno migratorio. Además, el presidente canario espera que las elecciones en Senegal en febrero de 2024 permitan estabilizar políticamente el país y trabajar en políticas migratorias comunes de la UE que generen mejores condiciones para hacer frente a esta situación constante.