En un movimiento histórico, el Cabildo de Tenerife ha dado luz verde a la implementación del denominado 'céntimo forestal', un recargo de hasta un céntimo sobre cada litro de gasolina y gasóleo. Esta medida, aprobada en pleno el jueves y que se espera que entre en vigor en el último trimestre del año, tiene como objetivo establecer un fondo sostenible para fortalecer las políticas ambientales y de conservación forestal en la isla.

El respaldo a esta iniciativa llegó por parte de los 17 representantes del Grupo de Gobierno Insular, conformado por Coalición Canaria (CC) y el Partido Popular (PP), mientras que los 10 votos de los socialistas se opusieron y el grupo mixto, representado por Vox, optó por la abstención.

La presidenta insular, Rosa Dávila, subrayó minutos antes de la votación la importancia de esta medida, al considerarla un "mensaje contundente en la lucha contra el cambio climático" y una herramienta para avanzar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Dávila enfatizó que los fondos generados beneficiarán de manera directa a Tenerife y Gran Canaria, las islas con mayor densidad de vehículos a motor.

Durante una reciente rueda de prensa, Dávila reafirmó su compromiso de que los recursos recaudados se destinarán de manera específica a actividades cruciales como la vigilancia de los bosques, la restauración de áreas degradadas y la prevención de la desertificación, asegurando así la protección del medio ambiente de la isla.

Una importante aclaración que realizó la presidenta es que los transportistas de mercancías quedarán exentos del recargo. Ella destacó que el propósito principal es desincentivar el uso de vehículos privados, dado que Tenerife presenta una de las tasas de motorización más altas del mundo, con más de 800 coches por cada 1,000 habitantes.

Dávila consideró que esta iniciativa, que ya forma parte de los presupuestos regionales previstos para 2025, representa un "cambio de modelo" en la movilidad, promoviendo un uso más sostenible del transporte público. "Es insuficiente proteger casi 1,000 kilómetros cuadrados de espacios naturales sin asegurar recursos para su preservación y cuidado", aseveró.

El director insular de Hacienda, Juan Carlos Pérez Frías, defendió la propuesta en el pleno, resaltando su finalidad ecológica y la creación de un "fondo permanente" que se mantenga a salvo de las fluctuaciones en los presupuestos. Este fondo está diseñado para abordar el creciente riesgo de incendios forestales, que se ha intensificado a causa del cambio climático y el abandono de la agricultura tradicional.

Se estima que la inversión anual para las acciones relacionadas con esta medida alcanzará los 20,5 millones de euros. Pérez Frías también puntualizó que, tras la última comisión plenaria, se aprobó una modificación que reduce el recargo del céntimo forestal de dos a un solo céntimo.

Por su parte, Aarón Afonso, portavoz del Partido Socialista, expresó su total desacuerdo con la medida, calificándola de "innecesaria". Criticó que se busque gravar a los residentes de Tenerife mientras se evade el cobro a los turistas, haciendo referencia a la reciente oposición de CC y PP a la ecotasa para turistas.

Afonso lamentó la injusticia de la situación: “La ciudadanía tiene crecientes dificultades para acceder a una vivienda asequible, lo que obliga a muchos a desplazarse largas distancias, aumentando así su dependencia del transporte”, señaló, añadiendo que el transporte público en la isla no está a la altura de las necesidades actuales.

Lope Afonso, vicepresidente del Cabildo y portavoz del PP, cuestionó al PSOE sobre su oposición a la medida en Tenerife mientras que en Gran Canaria apoyan la misma iniciativa, etiquetándola como un "oportunismo desesperado". "¿Es eficaz en Gran Canaria pero no aquí?" se preguntó, resaltando la falta de coherencia de sus argumentos.

Finalmente, la consejera de Medio Natural, Blanca Pérez, remarcó el déficit crónico de inversión en la gestión de los espacios naturales de Tenerife, subrayando la urgencia de establecer una financiación continua. "No podemos repetir los errores del pasado donde la inversión en políticas ambientales fue insuficiente", concluyó Pérez.