Desmantelan red de narcotráfico internacional que utilizaba Canarias como punto estratégico entre Sudamérica y Europa.

Una operación policial conjunta entre la Policía Nacional y otros organismos internacionales ha logrado desmantelar en España la considerada como la mayor organización de narcoveleros del mundo. Este grupo operaba entre Sudamérica y Europa y fue responsble del tráfico de 1.500 kilos de cocaína, así como de la detención de 50 individuos, 26 de los cuales fueron arrestados en territorio español.

La mayoría de los registros (13) se realizaron en Málaga, donde operaban algunos líderes pertenecientes al Cártel de los Balcanes.

Se ha revelado que la organización utilizaba España como un punto estratégico de enlace entre los dos continentes, creando 'narcorrutas' desde diferentes islas españolas hasta Sudamérica. También hacían uso de puertos como Valencia, Alicante, Almería, Málaga y Canarias para llevar a cabo sus operaciones logísticas antes de partir hacia Sudamérica.

En total, se han incautado 1.500 kilos de cocaína, ocho embarcaciones, 36 vehículos y 85 terminales telefónicos. Además, se identificaron 10 embarcaciones designadas específicamente para las 'narcorrutas' de la organización.

Las detenciones realizadas en territorio español fueron resultado de 28 registros llevados a cabo en varias provincias, incluyendo Málaga, Valencia, Almería, Alicante, Girona y Murcia. Otros 24 individuos fueron detenidos en Noruega y en otros países como Bulgaria, Reino Unido, Panamá, Trinidad y Tobago, Portugal y Colombia.

Entre los detenidos se encuentra un noruego con un historial delictivo previo de atracos a bancos y furgones blindados, quien se unió a la organización hace un año gracias a su experiencia en actividades criminales violentas.

Los líderes de la organización, conocidos como "el profesor", tenían más de 20 años de experiencia en narcotráfico y se encargaban de coordinar los transportes desde Sudamérica a España. Además, reclutaban a los tripulantes de los veleros y mantenían el contacto con los cárteles colombianos y mexicanos para garantizar un flujo constante de estupefacientes.

Algunos de los miembros de la organización pertenecían al Cártel de los Balcanes y llevaban un estilo de vida lujoso en la Costa del Sol, utilizando negocios legales para lavar el dinero obtenido de sus actividades delictivas.

La operación, liderada por la Policía Nacional de España, contó con la colaboración de varios organismos internacionales como la NCIS de Noruega, la DEA estadounidense, la NCA británica y el MAOC, con el apoyo de EUROPOL y agentes de otros países como Francia, Polonia, Portugal, Bulgaria, Panamá y Santa Lucía.

Esta operación conjunta se inició en junio de 2020 después de que las autoridades británicas detectaran la presencia de la organización en España y sus actividades relacionadas con el tráfico internacional de cocaína. Desde entonces, se llevaron a cabo acciones preventivas para evitar nuevas operaciones de narcotráfico en aguas internacionales, con la colaboración de diversos países en todo el mundo.