El Cabildo de Tenerife y CEOE-Tenerife han coincidido en la necesidad de desburocratizar la gestión, aumentar la inversión pública y ejecutar el presupuesto insular para impulsar la economía de la isla. Según la presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, el objetivo es que Tenerife recupere su liderazgo económico y se convierta en la locomotora del archipiélago.

La presidenta del Cabildo ha advertido que si Tenerife sufre, Canarias también sufrirá, por lo que es necesario darle un nuevo impulso a la economía insular después del punto de inflexión del año 2020 debido a la pandemia. Entre los retos planteados se encuentra reducir la tasa de desempleo por debajo de la media regional, recuperar el PIB previo a la pandemia y disminuir la diferencia en el PIB per cápita en comparación con el resto de España y la Unión Europea.

El presidente de CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, ha señalado que la aparición de la Covid-19 ha sido un golpe duro para la economía de la isla, a pesar de las medidas de apoyo implementadas como los ERTE, las ayudas directas y los créditos ICO. Alfonso ha destacado que el problema de la financiación autonómica y la burocracia excesiva continúan afectando negativamente al desarrollo económico.

Además, según Alfonso, el presupuesto del Cabildo ha superado los 1.000 millones de euros por primera vez y se espera que su ejecución se agilice, especialmente en relación a las grandes infraestructuras pendientes en la isla. De hecho, Alfonso ha pronosticado que si estos proyectos se llevan a cabo, en un plazo máximo de ocho años podría haber pleno empleo en Tenerife.

El director de Consultoría de Corporación 5, José Miguel González, ha destacado que Tenerife es un motor económico en el archipiélago, pero el PIB per cápita está por debajo de la media nacional y la tendencia empeora. González ha subrayado que la tasa de desempleo superior al 10% es inadmisible.

Según González, el turismo y la construcción son los principales impulsores de la economía de la isla, pero cada vez cobra más importancia el sector público, que ya representa una quinta parte del PIB insular. Aunque la construcción se está recuperando, queda mucho camino por recorrer para alcanzar sus máximos históricos, mientras que el turismo se beneficia del efecto de la inflación a pesar de la disminución de la estancia media.

González ha señalado que a corto plazo, el turismo y la construcción son imbatibles en Canarias en términos de generación de empleo, pero a medio y largo plazo sería recomendable introducir nuevos sectores productivos relacionados con el conocimiento, la digitalización y la formación.

En resumen, tanto el Cabildo de Tenerife como CEOE-Tenerife apuestan por medidas como la desburocratización, el aumento de la inversión pública y la ejecución del presupuesto insular para impulsar la economía de la isla. Se busca recuperar el liderazgo económico de Tenerife, reducir la tasa de desempleo, mejorar el PIB per cápita y diversificar los sectores productivos, sin abandonar el turismo como uno de los pilares fundamentales de la economía insular.