La isla de Gran Canaria se encuentra acogiendo a más de la mitad de los menores migrantes que han llegado al archipiélago en las últimas semanas.

El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha realizado una exigencia contundente al Gobierno de España y a las diferentes comunidades autónomas, pidiendo de manera urgente una distribución solidaria de los menores migrantes hacia la península.

En una declaración oficial, Morales ha destacado la necesidad de actuar rápidamente para evitar que los jóvenes migrantes que cumplen 18 años no se vean obligados a permanecer en la isla como si estuvieran en una cárcel permanente.

El presidente insular ha expresado su pesar por los recientes fallecimientos y heridas de jóvenes migrantes en centros de acogida en Telde, así como por los incidentes que se han suscitado en el sureste y norte de la isla.

Además, ha hecho hincapié en la preocupación generada en la ciudadanía y ha denunciado que estos hechos son aprovechados por algunos sectores para promover la confusión y la xenofobia.

El presidente ha subrayado que la masificación de los centros de menores en Canarias, principalmente en Gran Canaria, con más de 3.500 menores migrantes acogidos, representa una situación insostenible que debe ser abordada de manera urgente por las autoridades competentes.

En ese sentido, ha criticado la falta de acción de las administraciones públicas y de ciertos partidos políticos, señalando la importancia de compartir la responsabilidad de acoger a los menores en otras comunidades autónomas.

Además, ha puesto de manifiesto la precaria situación en la que se encuentran los centros de acogida, especialmente cuando los jóvenes alcanzan la mayoría de edad y se ven en la calle, sin recursos ni apoyo.

Por tanto, ha instado al Gobierno de Canarias a intensificar las medidas de formación e integración para los jóvenes mayores de edad, con el fin de evitar que se encuentren en una situación de vulnerabilidad al dejar los centros de acogida.

Finalmente, ha expresado su profundo dolor ante las muertes de personas en aguas próximas a Canarias, recordando la urgencia de abordar de manera efectiva la crisis migratoria en la región.