Aumentan delitos informáticos en Canarias: casi 16.000 casos en 2023, cinco veces más que en 2018.
En Canarias, al término del año pasado se registraron 15.872 infracciones penales por fraude informático, lo que representa un aumento del 35,7% con respecto a 2022 y cinco veces más que en 2018, según el estudio de Grupo Logalty titulado 'El fraude informático en España 2024'.
En el conjunto de España, se contabilizaron 426.744 fraudes informáticos el año pasado, un incremento del 27% en comparación con 2022 y el triple que en 2018, destacando el aumento en autonomías como Andalucía, Región de Murcia y Comunidad Valenciana. La Rioja fue la única en registrar una disminución en este tipo de delitos.
La Comunidad de Madrid, Cataluña y Andalucía concentran el 49% de los fraudes informáticos detectados el año pasado en España, sumando un total de 218.573 casos. Las tres autonomías registraron en promedio 599 fraudes diarios, y también se destacan los volúmenes en Comunidad Valenciana, País Vasco y Castilla y León.
A nivel provincial, se observa un crecimiento generalizado de los fraudes informáticos con muy pocas excepciones, y las provincias con mayor número de casos diarios son Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla.
Grupo Logalty enfatiza la importancia de implementar tecnologías en las organizaciones para hacer frente a la oleada de ciberataques y fraudes informáticos, especialmente relacionados con el robo y la comercialización de datos personales.
María Dolores Pescador, presidenta ejecutiva de Grupo Logalty, destaca la importancia de optimizar la gestión y protección de datos ante este desafío, destacando la necesidad de implementar tecnologías para prevenir los ciberataques y el robo de datos, así como detectar suplantaciones de identidad fraudulentas.
Grupo Logalty propone cinco claves para que las organizaciones puedan hacer frente a este tipo de infracciones penales, como incorporar tecnologías de protección de datos y verificación de identidad, estar al día con avances tecnológicos, desarrollar políticas de privacidad, establecer protocolos de actuación y concienciar a los empleados sobre la importancia de la prevención y gestión de datos corporativos.
María Dolores Pescador menciona que la evolución tecnológica ha abierto más oportunidades para los cibercriminales, destacando el aumento de robos de datos y falsificaciones de documentos de identidad, y subraya que solo con más tecnología las empresas pueden contrarrestar estas amenazas cada vez más sofisticadas.